Finis Terrae: Tribunal de Iberia para Ars Magica 5ª Edición

Backerkit
over 2 years ago – Thu, Jan 13, 2022 at 01:07:25 AM

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Regalo de Reyes Magi: Más monstruos… y Calebais
over 2 years ago – Thu, Jan 06, 2022 at 01:50:05 PM

Parece que los magi de Oriente han llegado cargados de regalos y sus pajes nos han dejado algunos avances de lo que serán dos nuevas recompensas añadidas a las ya desbloqueadas para Finis Terrae, como pequeña devolución de todo lo que habéis aportado.

Pero antes de eso, es un buen momento para recapitular todo lo que conseguisteis desbloquear en el mecenazgo y algunos detalles sobre esas metas que quedaron por desvelar.

Cuarta recompensa: Las fichas de seis personalidades herméticas, magi o magae, con sus ilustraciones. Aunque hablamos por encima de ellos en el directo, los personajes ya están escritos e incluidos en el libro, por lo que pasamos a desvelar sus identidades.

· Faustus de Flambeau, praefectus praetorio de Aedes Mercuri, la afamada Casa Mercer de Yubal, en la Corona de Aragón. Este magus, el más joven de la historia en asumir el cargo, no sabe guardar un secreto, lo que ya le ha traído más de un problema.

· Ágata Ex Miscellanea, aprendiza de Sesnando, un rusticani de la alianza de Serra da Lousã en el reino de Portugal, considerada por algunos un talento desperdiciado.

· Fortún de Guernicus, disceptator de la gran Duresca (en el reino de León), otrora brillante juez y ahora consumido por su adicción al látex de la adormidera blanca.

· Nuʿum Ex Miscellanea, una joven sahira de la alianza de Laminium, en el reino de Castilla, y responsable de devolverla a la Primavera después de que un avatar mágico sumiera a todos sus habitantes en el Crepúsculo salvo a ella… que estaba en Medina escuchando el cantar de Mio Cid.

· Tages de Tremere, filius de la gran Sitt Nasim de Toledo, enviado a la alianza de Barda, en pleno paraje semidesértico al este del reino de Navarra, para hacerse con las riendas de una alianza con mucho que callar.

· Layla de Verditius, carpintera de la poderosa Ajabeba, en el archipiélago balear, dominio del Imperio almohade. Esta excelente poetisa disfruta en soledad tocando su magnífico rabāb, “al-ʾafuww” (del árabe, «el indulgente»; de hecho, uno de los 99 nombres de Dios).

Quinta recompensa: 3 tradiciones no herméticas, cada una con un texto descriptivo, mecánicas y una ilustración. Las tradiciones elegidas finalmente son:

• La magia de los visigodos, ideada y redactada por el gran Ben McFarland de acuerdo a la información que aparece en el libro. Las reminiscencias de unos cultos hoy extinguidos que vivieron de forma solapada al Culto de Mercurio. Todavía se puede encontrar algún resto de esta magia arcaica en la Península.
• La tradición médica de los tiryaqi,  sabios capaces de preparar prodigiosos remedios médicos que no solo curan sino que también tienen otros efectos que un mundano solo podría definir como “mágicos”.
• Una tradición de hechiceros basados en el libro que se conocerá como Picatrix en la futura corte de Alfonso X el Sabio. El tratado es una traducción latina del manuscrito árabe Ghāyat al-Ḥakīm, escrito por el brujo Maslama al-Qurtubī y que, por supuesto, también aparece con sus estadísticas en el apéndice de la biblioteca mundana.

Sexta recompensa: Dos fichas completas de monstruos y dos lugares míticos con sus descripciones completas e ilustraciones.

En este caso, las dos criaturas sobrenaturales elegidas (a añadir a las que ya tenían su ficha incluida en el libro) son el ñuberu, un ser ancestral del norte de la Península con poderes sobre las tormentas y a menudo asociado a los tempestiarios, y el yinnī de Mons Niger, una criatura en torno a la cual gira buena parte de la alianza del mismo nombre, en la zona de los Monegros.

En cuanto a los lugares míticos, nos hemos decantado por las Columnas de Hércules, que será escrito por Ben McFarland, y un templo tartésico ubicado en la periferia del dominio de dicha cultura en el suroeste peninsular, destruido en el siglo IV mediante un ritual que llevó varios días y que acabó incendiándolo y preservándolo bajo una capa de arcilla para evitar que fuera profanado.

Y ahora, por fin, los dos regalos de los que hablábamos al principio. En primer lugar, se añadirá al libro un recuadro de unas trescientas palabras en el que propondremos tres posibles ubicaciones geográficas, dentro de la Península, para Calebais, la alianza que se usa como escenario principal del legendario módulo La alianza rota de Calebais. Además, se destacarán cuatro alianzas potencialmente candidatas a asumir el papel de Calebais en la historia de vuestras sagas. Por supuesto, no son más que sugerencias, pero seguro que os ayudan a definir mejor esta mítica alianza si vuestro deseo es jugar la aventura o simplemente incluirla en Iberia.

La segunda recompensa que viene desde Oriente no es otra que una criatura sobrenatural adicional a las dos que ya se habían desbloqueado con vuestras aportaciones: en este caso, el nasnās, un monstruo de aspecto simiesco con un solo pie y un solo brazo, que se desplaza dando saltos a gran velocidad. Los árabes creen que fue engendrado por un demonio llamado Shiqq y un ser humano, y se dice que su contacto puede matar a los hombres, los cuales quedan desollados en segundos. Así, el “simpático” nasnās vendrá a sumarse al ñuberu y el yinnī de Mons Niger, descritos más arriba.

Finis Terrae: Siguientes pasos
over 2 years ago – Tue, Dec 28, 2021 at 08:22:48 AM

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¡¡Campaña conseguida!!
over 2 years ago – Thu, Dec 23, 2021 at 08:34:03 AM

Salvete sodales.

Acaba de terminar la campaña y gracias a vosotras y vosotros hemos conseguido no solo financiarla sino desbloquear un montón de recompensas que incrementarán la calidad del libro enormemente.

Solo queríamos daros las gracias, nuevamente, por la confianza que habéis depositado en nosotros.

En unos días recibiréis el enlace para activar la cuenta de Backerkit donde continuaremos con la "post-campaña" y donde podréis gestionar y ampliar vuestra aportación.

Un abrazo muy fuerte y esperamos que paséis unas estupendas fiestas.

Flambeau e Iberia
over 2 years ago – Tue, Dec 21, 2021 at 03:23:11 PM

Salvete sodales.

Ya quedan menos de 24 horas y no queríamos despedirnos sin haber publicado una actualización sobre Flambeau e Iberia, una relación inseparable.

Si existe un Fundador cuya historia está inextricablemente unida a Iberia, ese es Flambeau. Es más, buena parte de su historia personal, al menos en ediciones antiguas del juego, venía narrada en el manual de Iberia para tercera edición. Ese Flambeau se nos presenta como un auténtico héroe: nacido en el 698 con el nombre de Reculed Annaeus Séneca en el suroeste de la Península, entrena como guerrero hasta que en el 712 su vida da un vuelco cuando un extraño le convence para abandonar a su familia y explotar el Don que posee. El extraño es el mago Delendar, quien empieza a adoctrinarle en sus artes arcanas. Reculed resulta de hecho tan brillante que acaba enseñándole al propio Delendar posibles aplicaciones de la magia en un campo de batalla. Pronto los dos dejan atrás la relación de maestro y alumno para convertirse en dos iguales con un objetivo común: la defensa de la cristiandad en la Península.

Así, sus nombres empiezan a ser temidos por el enemigo musulmán, que a menudo huye ante su presencia. Para entonces Reculed ya se ha especializado en la magia de fuego por la que pasará a la posteridad. Siempre según ese manual de tercera edición, los líderes musulmanes, furiosos, acaban reuniendo a un grupo de sahirs, hechiceros a los que encargan la tarea de eliminar a los dos magos. Tras una terrible batalla librada a los pies de los Pirineos, Reculed y Delendar se separan, y el último acaba cayendo ante sus enemigos. Reculed reaparece justo a tiempo para ver morir a Delendar y, furioso, extermina a casi todos los brujos. Solo unos pocos escapan de la matanza.

A partir de ahí la leyenda de Reculed se engrandece. Deprimido, cruza los Pirineos para aliarse con los nobles del sur de Francia y se cambia el nombre a Flambeau. Pero ni siquiera allí se libra de sus enemigos: los musulmanes cruzan la cordillera y solamente son frenados en la histórica batalla de Tours, donde Carlos Martel recibe la crucial ayuda mágica de Flambeau.

Es poco después de esa batalla cuando recibe la visita de Trianoma, en representación de Bonisagus, un mago que pretende formar la hermandad de magos más poderosa de Europa. A Flambeau la propuesta le parece casi ridícula, y solo una demostración práctica de la Parma Magica le convence para unirse a la causa. Pronto viaja a Durenmar y se une al resto de Fundadores. Pero, aun como mago hermético, seguirá obsesionado con vengarse de los hechiceros que mataron a Delendar. Infringe a menudo el Código, y habría ido mucho más allá de no ser por la vigilancia a la que le someten Guernicus y sus Quaesitores. También toma a su primer aprendiz, Apromor, con el que busca por toda Europa a magos que no se hayan unido a la Orden para «resolver» esa situación. Son los tiempos de la frase: «Únete o muere».

La muerte de Flambeau es igual de épica: Se reúne un grupo de aprendices y toda la vis que puede y lanza una ofensiva hacia el sur. Su ejército se cruza con uno musulmán con un contingente de sahirs. Flambeau y los suyos se ven acorralados en una torre, rechazando una y otra vez los ataques enemigos, pero sabe que es una batalla perdida. Por lo tanto, reúne la vis que le queda y lanza un terrible encantamiento que arrasa la torre y buena parte del valle donde se eleva, incluidos sus enemigos.

Con la llegada de la quinta edición de Ars Magica, esa épica biografía cambia en ciertos puntos clave, tal y como se explica en Houses of Hermes: Societates. Para empezar, Flambeau es gascón y no íbero, y no sabemos su nombre. Ese cambio, en apariencia menor, elimina en realidad una de las principales justificaciones para su feroz defensa de la Península frente a la invasión musulmana, que en este caso pasa a justificarse por su fervor religioso. Aunque con ciertos detalles modificados, él y su maestro viven aventuras parecidas a las anteriores al servicio de un noble de la Península, antes de que el primero muera.

Tras la muerte de su maestro, Flambeau se encierra en una cueva de los Pirineos para perfeccionar su arte. Tarda varios años en convertir un encantamiento menor que crea chispas y llamitas en lo que hoy se conoce como la Lanza de Llamas. Luego vuelve a Iberia y, tras acabar con los sahirs que habían matado a su maestro, se convierte en una figura temible en las guerras contra los musulmanes. Ha matado a una docena de sahirs cuando Trianoma le aborda para unirse a la Orden.

El Flambeau hermético de quinta edición también difiere del anterior. Deja de ser un personaje colérico para aceptar la Orden con más benevolencia. La frase “¡Únete o muere!” solo se pronuncia una vez, por petición expresa del mismísimo Bonisagus. Este Flambeau considera que la asimilación de tradiciones no herméticas no debe realizarse por la fuerza… salvo si son sahirs, claro. De hecho, se convierte en un avezado negociador y recluta a muchos magos mediante la diplomacia.

El mayor cambio entre ediciones se produce con la muerte del Fundador. En el 820, Flambeau es ya un anciano frágil. Una mañana sale de Val-Negra con rumbo desconocido y nadie le vuelve a ver. Algunos, como Apromor, sostienen que una vez más ha salido en busca de sahirs, tal vez para luchar contra ellos por última vez. Otra de sus aprendices, Elaine, recordando su devoción religiosa, sostiene que se ha enclaustrado en un monasterio, renunciando para siempre a la magia. Sea como sea, Flambeau no regresa nunca y su nombre pasa a convertirse en leyenda.

El “nuevo” Flambeau pierde una parte del carácter épico previo, pero sigue siendo uno de los Fundadores más carismáticos. Varios de estos cambios eran necesarios ante la revisión que sufre la Casa Flambeau en quinta edición. Pero tanto si muere de forma épica en una torre como si se enclaustra en un monasterio, su papel en Iberia sigue siendo el mismo, y Finis Terrae no podía dejar de retomar esa conexión tan especial en sus páginas. Aunque la biografía del Fundador está sobradamente narrada en Societates, en Finis Terrae su alargada sombra es perfectamente apreciable, por ejemplo, en Salionca y Brigantia, dos alianzas que el propio Flambeau diseñó como plazas fuertes en su lucha contra los sahirs, o en la antigua alianza (ahora convertida en monasterio) de Campus Stellae, donde se dice que Flambeau pasó sus últimos días. También se narran en el manual las aventuras de algunos de sus descendientes más célebres, como es el caso de Grimoald Niger, filius del Fundador y azote de sahirs, que registró sus propias hazañas en su Comentarii de Bello Iberico, un tractatus tan respetado en la Casa como polémico en el resto de la Orden por su cuestionable imparcialidad. Niger es solo uno de los muchos protagonistas de la “pacificación” realizada por la Casa en el norte de la Península, pero ni mucho menos es el único. 

Los Flambeau, de hecho, jugarán un papel trascendental en muchos de los acontecimientos clave a lo largo de la convulsa historia del Tribunal. 

Pero esa es una historia para otro momento…